Las experiencias cercanas a la muerte o ECM (en ingles near death experiences NDEs) son percepciones del entorno narradas por personas que han estado a punto de morir o que han pasado por una muerte clinica y han sobrevivido. Hay numerosos testimonios sobre todo desde el desarrollo de las tecnicas de resucitación cardiaca y segun las estadísticas, podrían suceder aproximadamente a una de cada cinco personas que superan una muerte clinica.
Fases
Según uno de los principales investigadores de ese fenómeno, el doctor en medicina y filosofía Raymond Moody los pacientes que han asegurado vivir este tipo de fenomenos coinciden en un patrón general de nueve fases consecutivas aunque no todos completan este itinerario y muchos solo lo atraviesan por alguna.
1.-El paciente se siente flotar sobre su cuerpo, y ve el dormitorio, el quirofano o el lugar donde se encontraba e incluso oye la declaración de su propio fallecimiento.
2.- Despues siente que se eleva y que atraviesa un oscuro túnel mediante una escalera o flotando en el vacio, y con una relativa rapidez.
3.-Ve aparecer una figura al final del tunel( que suele describirse como hermosa, blanca o transparente; a veces hay paisajes, voces o música).
4.-El paciente pasa a ser espectador, no siente dolor ni molestias, sólo percibe una paz interior.
5.-Algunas personas, sin embargo aseguran haber tenido experiencias terrorificas en el mas álla.
6.-Familiares o amigos difuntos van a su encuentro.
7.-Aparece una presencia o voz que se define en función de las creencias religiosas del paciente (puede tratarse de Jesucristo, de un angel,.etc) y se establece un diálogo sin palabras con ese ser que parece conocer todo sobre el moribundo.
8.-Se presenta una visión global pero íntegra de lo vivido, como si viese de "su pelicula"; el modelo más ajustado para describirlo según los testimonios es como el de una sucesión de filminas de momentos sueltos de la vida, no necesariamente importantes.
9.-El sujeto se ve delante de un obstaculo: una puerta o muro y toma conciencia de que aún no se ha muerto, y aunque sienta una paz y tranquilidad indescriptibles y acogedoras, se da cuenta, y tambien eso le indican sus acompañantes deben volver.
Tras este proceso quienes lo han experimentados pierden miedo a la muerte; no desean morir, pero se toman las cosas con más calma, serenidad y filosofía y, en cierta medida, son mejores personas, se preocupan más de los demas y son felices.